En un panorama educativo transformado para siempre por la pandemia, un estudio innovador de la Universidad Austral está allanando el camino para un cambio revolucionario en las prácticas de la educación superior. Dirigido por las investigadoras Belén Pagone, Cecilia Primogerio y María Sol Dias Lourenco de la Facultad de Ciencias Empresariales de la sede Campus Pilar de la Universidad Austral, el estudio muestra el poder transformador de la evaluación por portafolio en un curso introductorio de Economía.
La pandemia obligó a educadores de todo el mundo a reconsiderar los métodos tradicionales de enseñanza y evaluación, empujando la necesidad de enfoques innovadores y centrados en el estudiante. Este estudio responde a esa llamada, demostrando que el método del portafolio no es solo una solución temporal, sino una solución duradera para involucrar profundamente a los estudiantes, mejorando su comprensión y aplicación de conceptos económicos complejos.
“El enfoque del portafolio marca una salida de los exámenes convencionales, enfocándose en cambio en un método de evaluación formativo, reflexivo y personalizado. A los estudiantes se les encarga crear un portafolio que documente su viaje de aprendizaje, demostrando su capacidad para analizar, vincular y aplicar teorías económicas a escenarios de la vida real. Este método no solo evalúa lo que los estudiantes han aprendido, sino cómo lo han aprendido, ofreciendo una ventana a sus procesos cognitivos y fomentando un examen metacognitivo de su propio aprendizaje”, explica Belén Pagone.
Significativamente, el estudio encontró que el enfoque del portafolio lleva a una comprensión más profunda e integrada de la Economía. Los estudiantes reportaron una mayor capacidad para expresar ideas complejas, una motivación aumentada para aplicar conceptos a situaciones del mundo real y una capacidad mejorada para el aprendizaje reflexivo. “Estos resultados acompañan el cambio de paradigma en la evaluación educativa, enfatizando el desarrollo de habilidades de pensamiento crítico, resolución de problemas y comunicación sobre la memorización mecánica”, añade Pagone.
Además, las investigadoras subrayan la adaptabilidad del método del portafolio a entornos de aprendizaje tanto virtuales como presenciales, subrayando su relevancia en un mundo post-pandemia donde los modelos de aprendizaje híbridos se están convirtiendo en la norma. Esta flexibilidad asegura que los beneficios del enfoque del portafolio se puedan realizar en contextos educativos diversos, haciéndolo una herramienta valiosa para la educación empresarial internacional.
Las implicaciones del estudio se extienden más allá del aula, sugiriendo una reevaluación de las prácticas de evaluación en todas las disciplinas de la educación superior. Al fomentar un entorno de aprendizaje donde los estudiantes son participantes activos en su trayectoria educativa, el método del portafolio permite que los alumnos desarrollen las competencias esenciales para enfrentar los desafíos del entorno empresarial global del siglo XXI.
¿Qué es un portafolio?
Un portafolio es una colección de trabajos y actividades que un estudiante realiza a lo largo de un curso. En él, se evidencia el progreso del alumno, su capacidad de análisis, de síntesis y de aplicación de los conocimientos adquiridos.
¿Cómo se implementó un portafolio?
El estudio se llevó a cabo entre el segundo semestre de 2021 y el segundo semestre de 2022. Los estudiantes de Economía debían realizar un portafolio digital que incluía:
Los resultados del estudio fueron contundentes:
¿Qué opinaron los estudiantes?
Para obtener una perspectiva más amplia, se diseñó y distribuyó un cuestionario entre los participantes: 61 estudiantes respondieron de manera voluntaria y anónima, lo que representa aproximadamente dos comisiones regulares del curso.
Las opiniones de los estudiantes fueron contundentes. El 95% consideró que el portafolio ha sido útil o muy útil para su aprendizaje. Un alto porcentaje destaca que les ha ayudado a comprender mejor los objetivos del curso, integrar conceptos macro y microeconómicos, y desarrollar habilidades de comunicación.
«A diferencia de los exámenes tradicionales, centrados en pocos temas y bajo presión, el portfolio permitió mostrar lo aprendido en profundidad», explica un estudiante. «Además, fomenta la reflexión y la autoevaluación, aspectos cruciales para el aprendizaje autónomo».
Otro subraya: «Siento que el portfolio nos prepara para la vida profesional, donde debemos presentar evidencia de nuestro trabajo y reflexionar sobre el proceso».
La investigación concluyó que el uso de portafolios representa una oportunidad transformadora en la evaluación educativa. No solo permitió a los profesores tener una visión más completa del aprendizaje de sus alumnos, sino que también empoderó a los estudiantes como actores activos en su propio proceso de formación.
Este estudio abre la puerta a un modo de enseñanza donde el aprendizaje y la evaluación se unen para crear una experiencia educativa más rica y significativa.
¿Qué otras instituciones académicas aplicaron este método de evaluación?
El gran valor agregado del trabajo es que este método de evaluación es novedoso en Economía y Negocios. Existen otros antecedentes internacionales que sirvieron de inspiración para las investigadoras de la Facultad de Ciencias Empresariales, pero en otras disciplinas como medicina y carreras de formación docente, principalmente.
Esta innovación fue aplicada durante la pandemia, como parte de otras prácticas pedagógicas incorporadas a la materia: TATETI, evaluaciones 360, aprendizaje basado en proyectos, trabajos colaborativos entre facultades a nivel nacional y entre universidades a nivel internacional, etc. Antes de culminar la pandemia, las docentes lanzaron la evaluación final con portafolio de evidencias y, dados los excelentes resultados obtenidos en el aprendizaje y experiencia de los alumnos, lo mantuvieron en el regreso a la presencialidad. “El portafolio fue la última etapa de una serie de innovaciones pedagógicas que incluimos en el aula empujados por la pandemia, y que han permitido un aprendizaje más profundo y experiencial, también en el regreso a la presencialidad”, concluye Pagone.
