La semana pasada, en Perfil, Jaime Duran Barba publicó una interesante columna sobre los desafíos de China hacia Occidente. Lamentablemente, la columna reproduce supuestos falsos sobre las relaciones entre ciencia y religión. Equipara religión con magia y ateísmo con ciencia, y dice: “En la cristiandad ocurrió una lucha permanente entre la ciencia y el dogmatismo, descripta en el libro de Andrew Dickson White, que siempre terminó con el triunfo del punto de vista científico”.