¿Qué añade la noción de “persona” a las nociones de “mente” y de “yo”?
La noción de persona remite intuitivamente al ser humano y subraya de alguna manera su valor intrínseco. Desde un punto de vista filosófico, esta noción implica que alguien permanece idéntico a pesar de sus cambios, y que es autoconsciente. Teniendo en cuenta estas características, ¿Tiene esta noción filosófica un lugar en el abordaje neurocientífico? ¿No resulta una noción demasiado inmaterial para ser aceptada? ¿Se puede reemplazar la noción de persona por la de mente, como capacidad operativa? ¿Puede haber un yo impersonal?