El informe de julio/agosto 2024 muestra que se mantiene la confianza de los productores, aunque con una caída importante en las expectativas para los próximos 12 meses.

Se observa una mejora en las expectativas para realizar inversiones en activos fijos (maquinarias, tierras, etc.) El atraso en las ventas/fijación de precios de soja y maíz se basa en la necesidad de mantener stocks para el pago de arrendamientos y gastos de siembra, y no en las expectativas de precios o devaluación.